El Pincel de Luz

Sabemos de la Física que la luz blanca está compuesta por varios colores, desde el violeta hasta el rojo. La luz del sol al interactuar con la atmósfera va adquiriendo matices y tonalidades. Este fenómeno se ve acentuado durante el amanecer y atardecer, donde la capa de aire que atraviesa la luz es más extensa. La atmósfera actúa entonces como un prisma gigante, descomponiendo la luz incidente en sus componentes de color. Existen reglas para la dispersión de los colores, siendo el extremo rojo el color que menos se desvía de la trayectoria original, y el extremo violeta el color que más se dispersa. Esto explica por qué el cielo es azul, y por qué en un atardecer vemos colores anaranjados. El fenómeno óptico adquiere mayor riqueza tonal cuando la luz es además modulada por nubes de lluvia. Por eso, antes y después de la tormenta se debe estar muy atento, pues se podrían presentar oportunidades fotográficas excepcionales.


Aldea de Manzanar. Novena Región 2010

La imagen la hice en la Araucanía Andina, un día de Otoño después de una lluvia fuertísima, típica del Sur de Chile. Las nubes estaban bajas y recorrían la sinuosidad de las cumbres. Había dejado de llover como una hora antes del atardecer. Fue un espectáculo de luz precioso. La vegetación se pintó con distintos colores, desde un rojo suave hasta un amarillo prendido. Es sorprendente observar el paisaje la mañana siguiente, solo para comprobar que la vegetación tenía el mismo verdor. Inolvidables las pinceladas de color de Monet sobre el paisaje cordillerano.